Ahora que me he pasado The Darkness II, he de decir que esta segunda parte me ha gustado. Me ha dejado un buen sabor de boca, tanto, que decidí empezar el primer juego de Starbreeze Studios para volver a recordar el comienzo de esta genial historia.
Con los dos juegos aun muy recientes en mi mente, es un buen momento para hablar de ambos títulos, ponerlos sobre la mesa y compararlos, porque en este caso no podemos decir que esta segunda parte sea mejor ni peor que la primera. Ambos juegos tienen cosas buenas y malas. Se agradecen los nuevos cambios pero también se echan en falta buenos detalles del primer juego, lo que hace que ambas partes sean necesarias para completar de manera satisfactoria, la experiencia que ofrece The Darkness. Una historia que nadie debería perderse.
The Darkness
El acabado gráfico del primer juego sigue siendo muy bueno, posiblemente sea el que mejor recrea ese ambiente oscuro y triste que tan bien acompaña a la historia. Esa esencia gótica que tanto recuerda a la peli de El Cuervo, queda mejor representada en el juego de Starbreeze Studios. El viaje de Jackie al Infierno, es uno de los más originales que he podido ver en un juego.
El control es malo, impreciso y el movimiento de nuestro personaje muy torpe, algo que en ocasiones resulta desesperante y digo en ocasiones, porque es en el momento de usar las armas de fuego y movernos como una persona normal cuando el control se resiente, ya que cuando hacemos uso de la Oscuridad y sus poderes, este defecto se nota menos. De hecho es que no hay problema.
Algo que me gustó de este título era esa falsa libertad que el juego ofrecía al jugador, gracias a unas pequeñas dosis de exploración. Los viajes en el metro, moviéndonos por los barrios para ir descubriendo la trama principal y algunas misiones secundarias, hacían que el juego fuera menos lineal y era algo que se agradecía. Un aspecto que se ha perdido en la segunda parte, por culpa de unos escenarios mucho más lineales y guiados.
El juego de Starbreeze es más detallista, quizá por ese planteamiento más profundo. Esto puede apreciarse en pequeños aspectos, que a menudo son los que marcan la diferencia. Por ejemplo, si nos centramos en nuestras letales serpientes oscuras, en The Darkness tienen más animaciones, por ejemplo se pelean por comerse el corazón de nuestros enemigos. En la segunda parte son como más estáticas y se ha eliminado el movimiento de reptar para alcanzar a los enemigos desde una posición estratégica y la posibilidad de coger objetos grandes como coches. En general, transmiten una mayor sensación de ser algo «vivo» en la primera entrega.
Una de los aspectos más espectaculares que tenía este juego, eran los movimientos de ejecuciones con las armas de fuego, unas animaciones realmente impresionantes y violentas, que activábamos con los gatillos cuando estábamos cerca de un enemigo. Quizá la primera parte no es tan gore como el juego de Digital Extremes, pero estos movimientos eran realmente buenos y los impactos de bala en los cuerpos estaban muy bien recreados.
Si nos centramos en las armas de fuego, este juego sucumbe ante la nueva entrega. Están bien hechas y el movimiento que tienen al acercarnos a paredes y obstáculos, es un buen detalle pero carecen de animación de recarga y tampoco tienen disparo desde el alza, simplemente poseen un discreto zoom.
El multijugador tampoco es gran cosa. Como curiosidad lo pruebas y entretiene durante un momento pero rápidamente perdemos el interés. En este aspecto el multijugador de The Darkness II también ha sido una mejora. El cambio del deadmatch por una experiencia cooperativa, con la posibilidad de jugar con cuatro personajes diferentes, lo hacen más atractivo pero no hay nada como manejar a Jackie Estacado.
The Darkness II
Los creadores de esta segunda parte han querido poner su sello personal y lo han sabido hacer de una manera muy inteligente, respetando la primera entrega pero dando su punto de vista y recordándonos los orígenes de Jackie Estacado, el cómic. La verdad es que no se puede criticar negativamente este nuevo cambio, porque la estética Cell Shading queda de maravilla y hace que nos metamos de lleno en un cómic interactivo. A mi me ha gustado, pero hay que ser objetivos y si es cierto que se ha perdido un poco ese ambiente dramático y ese look más real de la primera parte. Este tipo de acabado gráfico, estilo cartoon, es bastante personal y no todo el mundo sabe valorarlo.
Si nos centramos un poco más en la historia de la segunda parte, he de resaltar que el mundo paralelo que crea la mente de Jackie es un detalle de película, como la Oscuridad va apoderándose del protagonista y cómo lo recrea en el interior de su cabeza.
Si hay algo de lo que pueden presumir ambas partes, es de su genial narrativa.
El control del Sr Estacado es una auténtica delicia y todo un alivio para los jugadores que disfrutaron con el primer juego, pues se ha corregido el principal defecto de este. Disparar, apuntar y movernos, son unas acciones que ahora están en perfecta armonía y es un lujo poder sembrar el caos con los diferentes tipos de armas y los poderes de la Oscuridad.
Este juego tiene una personalidad mucho más directa. Para fomentar esos tiroteos rápidos y ese ritmo frenético, el juego de Digital Extremes profundiza menos en detalles como los diálogos con personajes secundarios y limita el uso de » los oscuros». Ahora disponemos únicamente de un diablillo como ayudante, pero a cambio podemos controlarlo en algunos momentos puntuales.
Nuestro gran enemigo, la luz, tenía una mayor presencia en el primer juego. Quizá porque era un juego más oscuro, éramos más conscientes de esta amenaza. En la segunda parte, la luz pasa más desapercibida para el ojo del jugador, quizá por el colorido del acabado gráfico y casi siempre aparece representada por el mismo tipo de farolas. En el primer juego la luz venía de diferentes focos y nuestras serpientes absorbían la oscuridad para cargarse de poder.
La sensación de ser un juego muy lineal viene también provocada por unos escenarios mucho más cerrados y se echa en falta un poco más de libertad. A cambio tenemos una mayor interacción con el mismo, pudiendo coger diversos elementos del escenario para defendernos y atacar a nuestros enemigos.
El menú de habilidades para la Oscuridad y las armas de fuego es un auténtico acierto y añade más profundidad al juego, lástima que debido a la corta duración de la campaña principal y a una experiencia de juego lineal, esta novedad no es explotada como merece y pedía a gritos una experiencia de juego más exigente.
Hemos perdido las animaciones con las armas de fuego pero hemos ganado las de la Oscuridad y con estas, la violencia ha subido varios puntos, provocando en el jugador una sensación de gran poder frente a los enemigos. Nos sentimos un poco más destructivos y despiadados en esta segunda parte.
Lo que Digital Extremes tenía claro era que quería hacer un buen FPS y ha tenido muy en cuenta lo que buscan los amantes del género y nos han deleitado con unas estupendas armas, bien recreadas (sobre todo las pistolas) y con una gran presencia en pantalla.
=Conclusión=
Si te gustó el primero debes jugar al segundo y si empezaste por la segunda parte, no deberías perderte la primera ya que componen uno de los FPS más originales que hay en el mercado.
Es cierto que se echan de menos algunos buenos detalles de la primera historia, pero Digital Extremes los compensa con mejoras y otros detalles propios.
Su nueva apariencia puede gustar más o menos, pero desde luego no es un defecto. Mi opinión personal, es que el paso de The Darkness por las consolas ha tenido que ser así, con dos puntos de vista diferentes y en este detalle es donde encontramos una experiencia rica y variada para el jugador, mientras vamos descubriendo un argumento de auténtico lujo.
Si se cogieran todas las cosas buenas de estos dos juegos, sin entrar en debate sobre la apariencia gráfica, ya que aquí hay gustos dispares, podría hacerse una tercera parte realmente buena. Hay una historia genial y muy buenas ideas. Los errores están muy claros y a la vista. Únicamente hay que tener en cuenta las cosas buenas de cada uno y desechar los errores.
The Darkness tal vez no revolucione el género pero es inolvidable para el jugador que sabe apreciarlo y eso para mi ya es un triunfo.
La primera parte me gustó bastante y el nuevo está guapo pero esos gráficos de dibujos animads directamente podian ahorrarselos. Si quiero dibujos los pongo en la tele.
Tendré que probarlo, tiene buena pinta.
Como siempre, buena review, Rubio!
Estoy de acuerdo con Malevolus, he jugado a la demo, y lo único que me chirria un poco es el estilo «cartoon», me recuerda al juego «XIII». Por lo demás, es un juegazo, si me hago con el seguro que me lo pasaré encantado.
Saludos!
Pues el XIII es un pedazo de juego macho. A mi me gustó mucho y lo recuerdo con un especial cariño.