Switch está siendo todo un triunfo, camino de convertirse en uno de los mayores de Nintendo. Puede que no inventase el concepto de consola híbrida, pero sí ha sido la única que lo ha llevado a cabo con buen logro. Además ha creado toda una imagen de marca en torno a él y eso es una de las claves de su éxito. Algo que cuando tienes hace fácil que los demás estén de tu lado.
La relación entre Nintendo y las third-party ha ido de la mano del éxito de sus consolas. En SNES fue uno de los pilares para su envidiable catálogo, con GameCube se desinfló al ver que la consola no cumplía las expectativas, Wii U tuvo un apoyo nulo… Y ¿qué está pasando con Switch? Pues que casi todas quieren un trozo del pastel y a la fiesta hay que venir con regalo. Pero algunas solo traen el envoltorio.
Nintendo hace tiempo que se desmarcó de las generaciones, se mueve por conceptos. Y con Switch las third-party pueden explotar el aspecto portátil de grandes sagas nacidas en anteriores consolas. Lo que se traduce en un apoyo que ni nosotros mismos esperábamos. Aunque estos juegos -o recopilaciones- no lleguen a ser superventas, porque ya lo fueron en su momento, sí que hacen del catálogo de Switch algo muy atractivo para todos los usuarios. Y también un poco de cajón de sastre.
Acaban de lanzarse en ella dos grandes sagas, que no pensé ver en Nintendo, con Bioshock: The Collection y Borderlands Legendary Collection. Y creo que es una estupenda noticia pues muchos no pudimos disfrutarlas en su momento. En Switch funcionan a 30fps y no a 60fps como en otras plataformas pero no debemos olvidar que la consola de Nintendo es 15 veces más pequeña que una PS4. Al menos tienen una buena resolución y controles adaptados. Pero, ¿por qué no se ha incluido la tercera entrega de Bordelands? Supongo que porque el esfuerzo no le compensaba a Gearbox. Además, dudo que veamos Bioshock 4 en Switch. Y aquí llega una de las críticas a este cajón de sastre.
Son muy habituales los relanzamientos de juegos cuando una saga se estrena en una consola. Capcom es experta en ello. Antes de Devil May Cry 5 ya teníamos en PS4 y ONE los cuatro anteriores juegos. Una buena estrategia pues, por una parte, captó nuevos jugadores y, por otra, nos mantuvo entretenidos a los veteranos. Pero en Switch no está siendo así. Se están explotando las posibilidades portátiles de muchos juegos pero no se está teniendo en cuenta la experiencia de usuario.
Hay sagas con representación en la híbrida que parece que los juegos elegidos han sido de forma aleatoria, como Assassin’s Creed. Tenemos AC III Remastered (que incluye AC Liberation) y AC: The Rebel Collection (con AC IV Black Flag y AC Rogue), cuatro juegos que no son los mejores de la saga, ni los más representativos, pero que Ubisoft ha decidido que deben estar en Switch. Ni siquiera tiene pensado publicar en ella los últimos Origins ni Odyssey. E incluso hubiera tenido más sentido AC: The Ezio Collection, que son la esencia original de la saga y nos lo podrían haber vendido un poco así. Y luego tenemos la otra cara de la moneda con ejemplos como Doom, que podemos jugar del primero a Eternal en la portátil con muy buenas conversiones. Gracias Bethesda.
Y es que la mayoría de las third-party no traen sus últimas producciones con la excusa de la potencia, pero deberían pedir consejo a CD Projekt y su port de The Witcher 3. Tiran de glorias pasadas vendiéndonos que ahora las podemos jugar dónde queramos. Y esto me parece una idea genial, entendedme, pero si lo hacen que sea en condiciones. Porque es inexplicable que las versiones de Switch de RE5 y RE6 sí tengan control por movimiento pero la de RE4 no, cuando solo tendrían que haber adaptado la versión de Wii o haberle puesto un poco de ganas.
La híbrida es perfecta para volver a jugar grandes juegos pasados pero creo que su catálogo no debe basarse en la excusa de «por poder jugar en portátil». Que las compañías sean coherentes y nos traigan experiencias completas o adaptadas a lo que nos ofrece la consola. Buenos ejemplos: los dos primeros Bayonetta para hacernos amena la espera de la tercera parte, los Final Fantasy de PlayStation como reconciliación entre compañías o Collection of Mana por jugar a juegos inéditos en Occidente. Su concepto hace que pueda tener un catálogo muy amplio, pero espero que tenga coherencia pues, al final, las consolas se recuerdan por sus juegos. Y yo espero muchos y muy buenos en Switch.
No podría estar más de acuerdo. Todas las compañías que quieran un trozo del pastel que se lo curren un poco y traigan versiones de calidad sabiendo adaptarse a Switch. DOOM y The Witcher son claros ejemplos de que se puede. Como muy bien dices, a las consolas se las recuerda por sus juegos, no por su potencia, ni por si acabado, ni por la calidad de los materiales con los que está fabricada. Un texto de opinión pura de jugador sensacional, Ruryk.
Muy buena entrada Ruryk Z.Es cierto que Nintendo hace tiempo que dejó las generaciones para ir por su propio camino,y aunque con Wii U no se ganaron al público con la Switch lo han hecho y con muy buenos resultados. No me llama en exceso esta máquina y menos por su alto precio el cual lo veo muy elevado en mi opinión.Y las consolas, efectivamente, se recuerdan por sus juegos.