Un día después de unos intercambios de mails, va el gran Rubio y me dice: Tío porque no le echas pelotas y me escribes un artículo para BornToPlay. Esto me generó un mar de dudas, sin saber si al final estaría a la altura. Pero al cabo de unos días pensando sobre el tema a abordar y lo que podría hacer, se me ocurrió hablar sobre el extenso catálogo del que ahora mismo disponemos todos los jugadores que no para de crecer. Y claro está, la obligación que nos vemos todos como buenos jugones que somos de pasarnos todos los títulos que nos llaman la atención. Así nace esta reflexión: PRISONEROS DEL CATÁLOGO.
En La generación del Casual, como a mí, me gusta llamarla que nos encontramos actualmente y a la que muchos aseguran que le queda poco de vida, se nos han presentado varios debates. Que si la dificultad, la casualización de los títulos, la regeneración de salud, etc. Pero en este artículo aunque seguramente que pasaremos por todos, o casi todos ellos el que queremos tratar es el del gran aumento de catálogo que no para de crecer y crecer.
Todo este entramado de situaciones es debido también al gran crecimiento de número de jugadores que a buen seguro Nintendo y su máquina casual Wii tienen en parte buena culpa de ello. Pero todos sabemos que el principal detonante y artífice de este aumento de jugadores se debe principalmente a los modos multijugador de los títulos que parece ser que ya se tienen que instaurar por obligación en muchos de ellos. Vamos a profundizar un poco más en ello.
Con esta generación aterrizaron en consolas (no nacieron) los llamados modos multijugador, que grandes franquicias como Call Of Duty, FIFA, PES o Battlefield entre otros han sabido exprimir al máximo y haciendo que amigos de amigos se enganchen a este mundillo.
Y como todo esto es la pescadilla que se mueve la cola, todo el tema anterior tiene su algo que ver en todo esto. Y las consecuencias son tanto un grandísimo aumento del parque de consolas como de muchísimos jugadores, y porque no decirlo, en su mayoría novatos en este mundillo. Esto ha hecho reflexionar a la industria que se adaptó al cambio para atar y proporcionar nuevas experiencias a todo este nuevo ejército de jugadores hambriento y sediento de juegos, o eso creían ellos.
Digo eso creían, porque realmente la gran mayoría de la gente que se fue incorporando al mundo del videojuego únicamente estaba interesada en los multijugadores masivos de PES, FIFA, Battlefield o como no Call of Duty. Sin olvidarnos los que se compraron una Wii para usarla a modo de pisapapeles. En resumen, gente a la que no le importa lo más mínimo el catálogo o la calidad de los títulos, que simplemente les vale con recibir su nueva entrega anual de la saga de turno. Y todo esto nos repercute a nosotros, los jugadores de verdad.
Y diréis que porque. Pues muy sencillo, debido a todo este nuevo y suculento grupo de nuevos jugadores en potencia, las compañías y distribuidoras se pusieron manos a la obra y empezaron a trabajar y adaptar a diestro y siniestro para suministrar y copar el mercado de títulos (algunos mediocres debido a la necesidad de lanzarlos), para así tener bien nutrido de juegos variados a todo ese ejército. Ejército que no estaba por la labor, y ahí es donde entramos nosotros.
Jugones de verdad, de los de pura cepa, con casta a los que se la suda el multi, de los que no se amilanan frente a los RPG’s más duros o frente a ese puzle que nos exprimirá al máximo, pero todo esto nos da igual ya que solo tenemos un objetivo y superaremos cualquier adversidad con tal de conseguir ese ansiado premio. Un simple final a la historia de turno que en la mitad de las veces seguramente nos dejará un mal sabor de boca o con un regusto amargo. Pero realmente eso nos da igual ya que nuestra finalidad es acabar el juego y poder darle carpetazo para empezar con otro porque somos auténticos jugadores de verdad que llevamos mamando esto desde chicos.
Y ahora y gracias a todo este tema nos veo sumidos en un mundo lleno de videojuegos que pasarnos, y los que se le ha adaptado la jugabilidad, como su dificultad, dotándolos de esos checkpoints o esa regeneración de salud instantánea que tanto nos molesta. Pero no todo es malo, ya que muchos Triple A con su atractivo a los que no podemos atender y se quedan en las estanterías, y ya no hablamos de rejugarlos. Nos vemos obligados en la situación de elegir pero no a olvidar ya que pensamos jugarlos en otro momento y entonces es cuando nuestra lista empieza a crecer y crecer hasta que un buen día nos paramos a pensar y nos damos cuenta de que somos: PRISIONEROS DEL CATÁLOGO.
By P3L4T1 Gamers Town
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Bua, espectacular post. Solo decir que no es que me sienta indentificado, es que es lo que me esta ocurriendo ahora mismo con mi Play Station. Me dedico más a buscar, encontrar y comprar juegos de esa lista que todos hacemos para algún día poder pasarnos su historia. Y lo peor, que no paran de salir juegazos.
Chapeau
Bioshock,Uncharted,Mirror´s edge y más y más y más….
Un artículo genial P3L4T1, es la opinión y la sensación que sentimos muchos. Todos tenemos una lista que en muchas ocasiones va «pesando» demasiado pero también es importante ser selectivo.
Un gran comentario, enhorabuena.
Grandísimo!! No creo que se haya podido plasmar mejor la situación actual. En mi caso no se llena la estantería de juegos para meterles mano, me desespero por no poder comprar todo lo que me gustaría (es lo que tiene ser pobre). Por ejemplo, este año me encantaría meterle mano a MOH, far cry 3, crysis 3, nfs, the last of us, remember me, tomb raider… Y me quedaré sólo con FC3… Una lástima…
Gracias a todos, me alegro que os guste y sí. Yo también soy Un Prisionero del Catálogo.