Seguramente conozcáis la historia de Polybius, una máquina recreativa que vio la luz a principios de los años ochenta en EEUU y poco tiempo después fue retirada de los salones recreativos por los efectos negativos que provocaba en algunas personas que la jugaban. La máquina podía llegar a causar mareos, pérdida del conocimiento, pérdida de memoria, vómitos, temores, pesadillas nocturnas e incluso alucinaciones y tendencia al suicidio.

La historia de Polybius comenzó en 1981. Una compañía desconocida llamada Sinneslöschen (pérdida del sentido en alemán) distribuyó de repente un nuevo modelo de máquina recreativa que aun se encontraba  en periodo de prueba por varias ciudades estadounidenses entre las que estaban Oklahoma, Portland y California. Se distribuyeron únicamente unos pocos ejemplares por barrios de bajo nivel económico en estas ciudades comentadas.

Durante el juego manejábamos una nave con la particularidad de que nosotros no movíamos la nave hacia ningún lado, era la pantalla la que giraba alrededor de la nave describiendo una circunferencia. La mecánica del juego consistía en disparar a una serie de enemigos o meteoritos  mientras se producían en la pantalla una serie de figuras geométricas cambiantes sobre fondos extraños con juegos de colores y giros estroboscópicos.

A los efectos negativos citados al principio del artículo hay que añadir que muchos testigos que lo jugaron afirmaban haber visto mensajes subliminales escondidos en la pantalla, entre medias de ese laberinto de color e imágenes girando. Frases como «Kill your self «, «No thought» y «Surrender» eran algunas. Otros incluso, iban más allá y aseguraban haber escuchado voces y lamentos.

La recreativa alcanzó cierta popularidad y fue jugada por muchas personas que no experimentaron esos síntomas pero casualmente muchos de ellos coincidían en algo. Aseguraban que la máquina causaba una extraña sensación de adicción-odio hacia el juego. Al entrar en el salón recreativo no podían evitar pasar de largo sin echar una moneda y jugar una partida pero  después (aquí viene el apunte curioso) eran incapaces de recordar con precisión en qué consistía el juego en si. De ahí ese sentimiento de frustración y enfado.

Todo terminó cuando finalmente un jugador murió durante una partida a causa de un ataque epiléptico. Todas las recreativas de Polybius desaparecieron de la noche a la mañana sin dejar rastro alguno, incluso se negó y se niega su existencia. A partir de este punto es cuando nació la oscura leyenda de la recreativa maldita.

Tras el lamentable suceso nunca más se volvió a saber de Polybius (es imposible conseguirla) de ahí que se dude de su existencia, aunque se han creado imitaciones basadas en los testimonios de los jugadores que colaboraron a mantener viva la leyenda con detalles muy interesantes y curiosos.

La teoría que más peso alcanzó era que Polybius fue introducida en algunos salones recreativos como parte de un experimento secreto del gobierno de EEUU para llegar al subconsciente de las personas que jugaban a esta recreativa. Testigos oculares y personal de los recreativos aseguraban que al cerrar los locales habían visto en varias ocasiones a unos hombres vestidos de negro manipulando la recreativa y tomando anotaciones.

El testimonio más increíble fue el recogido a dos testigos, que aseguraban haber visto de casualidad y por olvido de aquellos extraños hombres de negro, una pantalla de la máquina recreativa con el menú donde se configuraban los supuestos patrones de comportamiento que el juego generaba en las personas.

Otra teoría que circuló por ahí y que era menos probable era que se trataba de una especie de venganza por parte de los japoneses después de la 2ª Guerra Mundial. Una especie de nuevo ataque a lo Pearl Harbor pero esta vez a la población y con un método fuera de lo común.

La completa desaparición de Polybius  sin dejar rastro alguno hizo pensar a muchos que nunca existió tal recreativa, sin embargo hay muchísimos archivos donde aparece reflejada la palabra «Polybius», su año de salida y la marca que la creó. También ayudan a la veracidad de su existencia los testimonios de los dueños de los locales que confirman que tuvieron esa máquina en sus salones recreativos y la presencia de aquellos hombres configurando la máquina y tomando notas de las puntuaciones más altas recogidas en la máquina. ¿Dónde andarán esas recreativas hoy día y quién las tendrá guardadas?. Sería un puntazo poder ver alguna.

Sea o no un experimento o una leyenda yo pienso que está muy claro que realmente existió pero tras la muerte de aquella persona y dado que la prensa sensacionalista y los políticos no se llevan muy bien con los videojuegos, seguramente se intentó tapar todo lo posible y más en los años ochenta.

Imaginaos por un momento que os aventuráis por uno de esos salones recreativos cerrados, abandonados y de pronto os topáis con una vieja y polvorienta máquina de Polybius. ¡¡¡ Anda que iba a tardar mucho en enchufarla y echarme un vicio… pero vamos… y echando hostias!!!

Mi opinión que no es muy cerrada para este tipo de cosas  y para  la parapsicología en general, es que toda leyenda tiene siempre algo de verdad. Si toda esta historia fuera cierta, me da algo que pensar porque si hicieron eso con una simple recreativa, imaginaros por un momento lo que pueden hacer hoy día con nuestras consolas. ¿Nos comen el tarro?, ¿nos cuelan mensajes subliminales? jejeje quizá… pero con unos gráficos y unas historias que lo gozas.