El próximo 30 de mayo Wii U recibe una de las incorporaciones de peso, una de las series más famosas dentro de la familia Nintendo. Mario Kart 8 entrará derrapando con su peculiar carisma y diversión para fortalecer a un catálogo que precisa recibir toda la artillería, en forma de títulos y franquicias, que siempre han caracterizado a sus máquinas-madre.
Nintendo está pasando por un momento complicado pero personalmente no considero que esté perdida, en el sentido de no saber qué hacer. No es la primera vez que se enfrenta a una situación como esta, de hecho la historia parece repetirse desde los tiempos de Nintendo 64 pero lo que parece estar claro es que ha llegado el momento de replantearse algunas cosas a nivel interno. Aquellos que sentimos un apego especial a esta compañía y a sus juegos, sabemos que tienen una magia y un encanto sencillamente únicos y difícilmente podríamos concebir los videojuegos sin un Zelda o un Mario.
Es momento de coger ritmo y lanzar al escenario a todas sus estrellas, momento de ignorar a todos aquellos que gratuita e injustamente atacan por inercia, es momento de que la gran Nintendo haga uso de ese ingenio que la caracteriza y consiga estabilizar la situación.