Si eres un seguidor de la saga Hitman seguramente habrás quedado sorprendido con Absolution. Primeramente por la nueva dirección del juego, mucho más cinematográfica y segundo por su apartado gráfico, realmente bueno gracias al uso del Glacier 2, el nuevo motor que ha empleado IO Interactive para la nueva entrega del agente 47.
Esta espectacularidad y este estilo cinematográfico denotan una clara influencia de una de las exclusividades más jugosas de PlayStation 3, la saga Uncharted, y concretamente de su tercera entrega. Este influjo también está presente en algunos aspectos jugables, impregnándose en situaciones repletas de acción y movimiento como huidas o momentos límite, pero también durante los combates cuerpo a cuerpo, donde aparece la típica animación donde debemos pulsar dos o tres botones diferentes para dejar fuera de combate a nuestros enemigos.
Otro de los elementos que ha sufrido un cambio es el disparo. Ahora podemos apuntar con precisión, acercándose la vista considerablemente al punto de acción o del disparo, con la típica posición que patentó Resident Evil 4. Ahora es mucho más sencillo apuntar y disparar. La introducción de un sistema de coberturas a lo «Gears of War» es otra de las fórmulas que toma prestado este nuevo Hitman. Habrá opiniones para todos los gustos, sobre todo entre los seguidores de la saga (entre los que me incluyo) pero es cierto que estas dos novedades también han servido para corregir indirectamente uno de los defectos de la saga y era esa cierta sensación artificial en el movimiento y en el control.
Otra de las cosas que llaman la atención son los escenarios, repletos de detalles y muy bien realizados pero si es verdad que también se echa de menos algún nivel con las dimensiones con las que se nos deleitaba en anteriores entregas. Escenarios realmente grandes donde llegabas a perderte.
Algo que desde luego no me ha gustado es el nuevo sistema de checkpoints, situados a lo largo de los niveles para guardar nuestro avance y que nosotros mismos tenemos que activar al pasar por encima. Desde mi punto de vista es algo que «chirría» dentro de la saga Hitman. Un simple guardado automático de los de toda la vida hubiera funcionado mejor.
Dejando a un lado estas novedades, Absolution mantiene intactas las cualidades más importantes de un Hitman. El sigilo sigue siendo fundamental para disfrutar del encanto y la experiencia que ofrece esta serie. La variedad y la inventiva a la hora de abordar nuestros objetivos sigue siendo otro de los fuertes del agente 47, un personaje que goza de una gran presencia, más maduro, más personal pero a la vez igual de oscuro.