Nos encontramos ante uno de esos videojuegos de habilidad que pueden llegar a resultar un tanto frustrantes por su control y al mismo tiempo consiguen divertir y enganchar precisamente por ese mismo motivo.
En Daddy Long Legs nos ponemos en el papel de una especie de araña gigante de patas largas y cuerpo cuadrado a la cual tendremos que guiar sus pasos durante su recorrido por una especie de pista donde se va marcando la distancia que conseguimos recorrer y alcanzar con este extraño ser.
El único objetivo del juego es avanzar controlando el movimiento de la criatura a través de las pulsaciones en la pantalla. Una pulsación consigue mover una de las patas hacia delante de forma automática y en el momento adecuado (es difícil saber cuándo) volver a pulsar la pantalla para que la otra pierna se active. Aunque esto aparentemente pueda parecer sencillo realmente no lo es en absoluto dado que el simple hecho de dar dos pasos resulta harto complicado y finalmente terminemos la mayoría de las veces estrellando al personaje contra el suelo completamente espatarrado. 100 caídas te esperan por delante antes de que consigas avanzar unos pocos metros.
Daddy Long Legs no ofrece nada más, solamente intentar avanzar, una tarea frustrante donde todos esos intentos fallidos por hacer que el personaje recorra unos pocos metros nos permite descubrir diferentes logros por caer de una determinada manera gracias al sistema de físicas o por avanzar una distancia concreta, permitiendo además contrastar nuestras puntuaciones con las de otros jugadores del mundo. Puedes intentarlo desde aquí pero antes no olvides armarte de paciencia.