Análisis Hitman 3

El fin de una era

La serie Hitman ha cumplido 20 años. Este análisis de Hitman 3 se adentra en el cierre de la última trilogía del Agente 47, analizando brevemente la evolución de su trayectoria. Durante todo este tiempo lo hemos acompañado en más de 100 misiones por seis continentes a través de 7 juegos principales. Como resultado a tan ilustre carrera, cada uno recuerda sus misiones favoritas y aquellos objetivos que pusieron a prueba nuestro ingenio y habilidad.

En el año 2000 el estudio danés IO Interactive nos adentraba en el emocionante mundo de los asesinatos por encargo con Hitman: Codename 47. Desde entonces, la serie no solo se ha convertido en un referente dentro del género del sigilo. El Agente 47 se ha labrado un merecido puesto como icono del videojuego moderno, situándose entre personajes de la talla del Jefe Maestro, Max Payne o Nathan Drake.

Absolution marca un antes y un después en la serie. Este juego es la línea que separa los «Hitman clásicos» de su faceta más actual. Lanzado en 2012, es el inicio de una trayectoria que sirve para definir al personaje de 47 y su historia. Sin embargo, también es el comienzo de un cambio. La aproximación de la serie a un público más amplio supone cambios en la jugabilidad, nueva estructura de niveles y una personalidad más cinematográfica y comercial. Las entregas posteriores, a partir del reinicio de 2016, han seguido perfilando una vertiente competitiva a través de los desafíos y tablas de puntuación online. IO Interactive ha experimentado ciertas dificultades en esta última trilogía, con una entrega episódica y cambios de editora.

Análisis Hitman 3

Hitman 3 completa la trilogía actual con la opción de importar todos los escenarios de los dos juegos anteriores, si en su momento los adquirimos. Si no es tu caso, el juego ofrece seis nuevos niveles ambientados en diferentes partes del mundo donde llevar a cabo la ejecución de un asesinato profesional. Las misiones son rejugables pero es un contenido escaso para una nueva entrega por la que desembolsamos 70 euros.

Para llevar a cabo nuestra misión gestionamos un plan de aproximación a nuestro objetivo. Debemos penetrar dentro de un amplio escenario haciendo uso de nuestra habilidad para pasar desapercibido y emplear distintos recursos manipulando la IA. Cada nivel funciona como un ecosistema con sus propias normas. En ellos encontramos distintos personajes que por su condición o rango en el entorno pueden alterarlo, en contra de nuestro progreso y a favor si conseguimos suplantar su identidad mediante el uso del disfraz, recurso habitual en la serie.

Hitman 3 no aporta significativa novedad a todo lo que ya conocemos. Los escenarios lucen espectaculares gracias a su amplio y cuidado diseño. Una virtud constante desde los comienzos del Agente 47 y una seña de identidad que ha ido mejorando gracias al avance técnico.

Las mecánicas de sigilo/acción ofrecen la mayoría de las posibilidades que hemos ido experimentando durante todo este tiempo y tampoco encontramos novedades relevantes. Resultan interesantes las historias de la misión, objetivos que tenemos que ir completando cuando suplantamos la identidad de alguien. Una serie de tareas que conseguirán acercarnos a nuestro objetivo sin levantar sospecha. Un recurso un poco más elaborado más allá de ponernos un disfraz para pasar desapercibidos.

Hitman 3 sigue siendo una experiencia entretenida. Completar un asesinato de forma limpia sin ser detectados siempre es un reto. Requiere estudio, exploración y el sigilo siempre resulta emocionante. Sin embargo, desde hace unos años las nuevas entregas ya no resultan tan divertidas de jugar.

Posiblemente intervienen varios factores en esta sensación negativa. Las tácticas que aplicamos son las mismas de siempre y no sorprenden tanto. Añadir nuevas técnicas de infiltración o movimientos y menos DLC’s o tablas de clasificación podría servir para paliar este efecto.

Es una realidad que ciertas decisiones aplicadas sobre la jugabilidad en las entregas modernas, desde Absolution, han contribuido a mejorar el control pero otras han limitado la diversión. La posibilidad de escoger libremente el equipo del mismo modo que teníamos en las primeras entregas (Silent Assassin o Blood Money) y otras acciones que han ido desapareciendo dentro del repertorio de habilidades han logrado restar encanto a los últimos juegos.

Son muchos medios los que han calificado el desenlace argumental de este juego como un broche de oro. Después de haber jugado el final de muchas aventuras de 47, puedo afirmar que el último nivel de esta entrega ha sido con diferencia el peor de toda la serie. El final de la historia es flojo, pero si nos ceñimos al nivel de dificultad este es prácticamente nulo. El diseño del último escenario queda muy por debajo del resto de niveles y resulta un paseo en línea recta donde apenas encontramos opciones ni complicación. Una vez más, el contraste con las primeras entregas sale a relucir, pues el enfrentamiento final a menudo exigía un extra de dificultad.

Después de 20 años como uno de los referentes del sigilo, el Agente 47 requiere un merecido descanso. Hemos disfrutado mucho con su trayectoria, sobre todo con sus primeras cuatro entregas. Desde mi punto de vista, las mejores. Hitman 3 completa una etapa con un juego correcto pero demasiado corto y abusando del pase por caja. Mantiene una fórmula eficiente adaptada a las dificultades de los nuevos tiempos y mostrando un desgaste normal producido por el paso de los años.

¡Suscríbete a nuestro canal!

7

Share this post

RUBIO

Un videojuego puede ser como un buen libro o una gran película. Siempre digo que existe un juego para cada persona. Si aún hay alguien por ahí que no se ha enganchado a los videojuegos es porque todavía no ha encontrado su juego. Cuando lo encuentras, descubres una llave que abre la puerta a un mundo de diversión y entretenimiento sin igual.

2 comments

Add yours
  1. Ruryk Z 20 abril, 2021 at 14:20 Responder

    Genial el análisis Rubio, ¡cómo siempre!
    Desde casi el principio he tenido la sensación de que el Agente 47 ha estado en segundo plano, que no se le ha dado la importancia que se merecía. Nunca ha tenido la repercusión de otros como Sam Fisher pero sus juegos han tenido buenas valoraciones.
    Lo que me gusta es que sigue pareciendo un juego de la vieja escuela, de los 2000. Aunque por lo que dices puede que sus mecánicas se hayan quedado un poco desfasadas.
    Siempre he sido muy partidario de que algunas sagas terminen en algún momento. Y puede que al Agente 47 le haya llegado, ¿no?

  2. Voyevodus 21 abril, 2021 at 09:35 Responder

    Muy buen análisis. Sin destripar el juego, hablando de lo importante. Yo he jugado los dos primeros de esta última trilogía y coincido, 47 necesita un descanso. Pero largo. La fórmula no da para más. Tiene cosas buenas pero se queda a medias. Si en lugar de 3 juegos hubieran hecho uno solo con todo lo bueno creo que hubiera sido mejor.

Post a new comment

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.