La calidad es un concepto esencial en el desarrollo de cualquier producto, y los videojuegos no son una excepción. Sin embargo, en esta industria, a menudo se le da menor prioridad de la que merece, considerándola como un simple punto final en lugar de un proceso integral. Esto ha llevado a malentendidos y prácticas poco efectivas en torno al QA (Quality Assurance) y el testing, resultando en experiencias de usuario pobres y problemas técnicos que podrían haberse evitado.

¿Qué es la calidad?

La calidad en el contexto de los videojuegos se refiere a la capacidad de un producto para cumplir y superar las expectativas de los jugadores. Incluye aspectos como jugabilidad fluida, estabilidad técnica, un rendimiento óptimo y una experiencia visual y sonora coherentes. Pero, más allá de estas dimensiones, la calidad también implica la ausencia de problemas que puedan interrumpir la inmersión del jugador o causar frustración.

A diferencia de lo que algunos podrían pensar, la calidad no es algo que simplemente se agregue al final del desarrollo. Es un atributo que se construye desde las primeras etapas del proyecto, basado en procesos, buenas prácticas y una colaboración eficaz entre todos los equipos involucrados con el fin de crear la mejor experiencia posible.

Diferencia entre Testing y QA

Un error común en la industria es confundir testing con QA, usándolos como términos intercambiables. Aunque están relacionados, representan enfoques distintos dentro del ciclo de desarrollo.

Testing: Se enfoca en la ejecución de pruebas específicas para identificar errores en el producto. Es una actividad reactiva que busca confirmar que el juego funciona según lo esperado.

Quality Assurance (QA): Es un enfoque proactivo y más amplio que abarca todo el proceso de desarrollo. QA incluye el diseño de estrategias, prevención de errores y la implementación de buenas prácticas para garantizar que la calidad sea una característica inherente del juego.

La falta de comprensión de estas diferencias puede llevar a que los equipos de QA sean percibidos como simples detectores de bugs, subestimando su rol estratégico en el éxito de un proyecto.

Tradicionalmente en los videojuegos se hace solo testing olvidando las otras actividades de QA

En muchos estudios de desarrollo, el equipo de QA se limita casi exclusivamente a las actividades de testing. Esto significa que la calidad solo se evalúa en etapas tardías del proyecto, cuando los problemas ya son más difíciles y costosos de solucionar. Este enfoque reactivo ignora otros aspectos cruciales relativos a la calidad, como:

• Diseño de procesos para evitar errores.
• Integración de pruebas desde el principio (manuales y automáticas).
• Evaluaciones de riesgo y planificación para mitigar problemas futuros.

Esta reducción de QA a solo testing no solo limita la efectividad del equipo, sino que también incrementa los riesgos de lanzar un producto con defectos significativos.

La calidad es una cualidad del juego derivada de las acciones de los desarrolladores y no es propiedad del equipo de QA

Un mito común es pensar que la calidad es responsabilidad exclusiva del equipo de QA. En realidad, la calidad es el resultado colectivo del trabajo de todos los equipos involucrados en el desarrollo. Diseñadores, programadores, artistas y productores contribuyen directamente a la experiencia final del jugador.

QA actúa como un facilitador, proporcionando herramientas, estrategias y retroalimentación para que los demás equipos puedan crear un producto de alta calidad. Sin embargo, si los equipos no adoptan una mentalidad orientada a la calidad, el esfuerzo de QA será insuficiente para compensar las deficiencias.

La visión tradicional del Testing y cómo se menosprecia su valor

Históricamente, el testing ha sido percibido como un rol de menor importancia dentro del desarrollo de videojuegos. Esta visión ha llevado a prácticas como:

• Contratar testers sin experiencia ni formación.
• Considerar el testing como una actividad repetitiva y sencilla.
• No plantear QA como una carrera profesional.
• Reducir la inversión en formación, herramientas y recursos para el equipo.

El resultado es una alta rotación de personal, baja motivación y, en última instancia, productos de menor calidad. Resulta esencial cambiar esta mentalidad y reconocer el valor estratégico del testing como una parte integral del desarrollo.

Falta de profesionales formados y entrenados en los equipos de QA

Uno de los mayores desafíos en la industria es la escasez de profesionales de QA debidamente capacitados. Muchos estudios ven el equipo de QA como un puesto de entrada, sin invertir en formación continua o en la contratación de expertos.

Esto genera problemas como:

• Procesos inconsistentes: Sin personal capacitado, es difícil establecer estándares de calidad.
• Baja efectividad: Los equipos con poca experiencia tienen dificultades para identificar problemas complejos o implementar soluciones eficaces.
• Falta de innovación: La ausencia de conocimiento especializado limita la capacidad de QA para adaptarse a nuevas tecnologías y metodologías.

Riesgos de tener un equipo de Testing poco profesional en el desarrollo de un videojuego

Un equipo de testing poco profesional no solo compromete la calidad del producto, sino también el éxito comercial del proyecto. Las consecuencias para el estudio al lanzar un juego de baja calidad son:

• Aumento de costes: Los problemas descubiertos tarde son más caros y difíciles de solucionar.
• Pérdida de confianza: Los jugadores tienen opciones infinitas y poca tolerancia para los productos defectuosos.

¿Por qué es importante un buen equipo de testing a la hora de desarrollar un videojuego?

Este equipo desempeña un papel crítico en el desarrollo de videojuegos, actuando como los ojos del proyecto para identificar problemas que podrían pasar desapercibidos. Entre sus principales contribuciones se encuentran:

• Detección temprana de errores: Cuanto antes se descubran los problemas, más fácil y barato es solucionarlos.
• Evaluación de la experiencia del jugador: Ayuda a identificar aspectos que pueden no ser bugs técnicos, pero que afectan negativamente la jugabilidad.
• Compatibilidad y rendimiento: Garantizan que el juego funcione en todas las plataformas objetivo, con un rendimiento óptimo.

Sin un equipo profesional y bien organizado, es casi imposible garantizar que un videojuego cumpla con los estándares de calidad que los jugadores esperan.

Conclusión

La calidad no es solo un objetivo deseable; es una necesidad en una industria tan competitiva como la de los videojuegos. Cambiar la percepción y práctica en torno a QA y testing es crucial para garantizar que los juegos no solo cumplan con las expectativas, sino que también ofrezcan experiencias memorables. Esto requiere invertir en equipos profesionales, entender la diferencia entre testing y QA, y fomentar una cultura de calidad en todo el proceso de desarrollo. Solo así podrá la industria superar los retos actuales y alcanzar su verdadero potencial.

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