El próximo 14 de noviembre llegará la versión remasterizada de Turok 3: Shadow of Oblivion. En 2015, la compañía norteamericana, Nightdive Studios, especializada en remasterizar clásicos, lanzó Turok: Dinosaur Hunter. Posteriormente, en 2017, hizo lo propio con Turok 2 Remastered.
Turok 2: Seeds of Evil cumplirá 25 años próximamente. Fue en diciembre de 1998 cuando llegó a nuestro país. Actualmente, la mejor opción para celebrarlo es jugando su versión actualizada. Anteriormente, ya habíamos dedicado un reportaje a Turok 2 pero nunca habíamos hablado sobre esta remasterización en formato físico para PS4.
Turok 2 Remastered no presenta un cambio demasiado llamativo. Más bien, ofrece una adaptación potenciada, calculada para sustituir al original haciéndolo más competente sin perder su carácter noventero. La versión de Nintendo 64 resultaba un portento en su momento. Pero el paso del tiempo y la idealización de un título cimentado en nuestra memoria a menudo pueden pasar factura.
Esta remasterización contribuye a mantener el grato recuerdo que tienes de Turok 2. Las pequeñas mejoras visuales y un control optimizado sirven para pulir esos defectos que actualmente acusaríamos jugando la obra original. La fluidez de movimiento y la ausencia de ese molesto cabeceo que tenían las armas mientras avanzábamos son buenos ejemplos.
El resto ya lo conoces si en su día jugaste a este pedazo de clásico del estudio Iguana. Un FPS que afianzó un género en las consolas de su generación. Durante aquellos años los juegos de disparos en primera persona resultaban exuberantes en PC. Junto a Goldeneye y Perfect Dark, Turok 2 demostró que los buenos FPS también eran posibles en una consola.
Para el recuerdo han quedado las animaciones de los enemigos, su IA y algunos jefes. El comportamiento de nuestros rivales a menudo consigue arrancarnos una sonrisa. En ocasiones, si son especies distintas, luchan entre ellos, nos dicen adiós cuando activan el camuflaje óptico, huyen despavoridos al verse superados, incluso se inmolan cuando están acabados. Así mismo, los desmembramientos y el sistema de daños también resultan célebres en este juego.
Del mismo modo, destacan la contundencia y la originalidad de su arsenal. El inolvidable Cerebral Bore, las flechas atravesando el cuerpo de nuestros adversarios o los diferentes tipos de munición. Así mismo, los efectos de luz y el sonido también dejaron huella. Las melodías orquestales de su banda sonora permanecen grabadas a fuego, así como la sensual voz de Adon anunciándonos el nombre de cada nueva arma que recogemos.
El diseño de sus niveles también es una seña con carácter en Turok 2. Evidentemente, algunos resultan más inspirados que otros pero todos comparten la clásica estructura laberíntica. De tal manera que siempre tendremos que explorar, terminaremos perdidos buscando una llave o ese recoveco olvidado. En cualquier caso, ese constante rastreo por los escenarios tiene su recompensa y a menudo el juego obsequia con munición y vida extra antes de encontrar la salida. No obstante, esta versión incluye pequeños cambios para hacer un poco más asequibles ciertas situaciones.
Turok 2 continua siendo una experiencia con encanto para cualquier adorador de los disparos en primera persona. Este remaster nos devuelve a una época donde las reglas de aquellos años resultan más gratificantes que la mayoría de las modas actuales. Prueba de ello, es que los videojuegos exigentes siguen teniendo adeptos. Los jugadores continúan buscando experiencias menos comerciales que supongan un verdadero reto. Como antaño.