La cultura del videojuego es apasionante, cada vez son más los que contemplan este medio como una forma de arte, tema que sigue generando gran controversia dentro de la industria, entre la propia comunidad de jugadores y por supuesto más allá de las fronteras de esta emocionante forma de entretenimiento.
De lo que no hay duda es que en los videojuegos existen potentes elementos e influencias artísticas, presentes en sus imágenes, sus historias, la música, el desarrollo conceptual… y por supuesto detrás de todo esto hay grandes artistas, auténticos artesanos del videojuego (no todos pueden alcanzar semejante condición) que sobresalen por encima del resto gracias a su enorme talento y esa originalidad atrevida que a menudo suele ser fundamental para que el videojuego como medio y forma de expresión siga creciendo y evolucionando.
Los jugadores sabemos que para nosotros esto es una especie de religión y a menudo lo demostramos no solo adquiriendo y coleccionando videojuegos generación tras generación. Adornar nuestra habitación o sala de estar con pósters de videojuegos, desayunar con una taza de café con un diseño inspirado en la vertiente retro del videojuego, incluso prendas de ropa que consiguen despertar alguna envidia o mirada cómplice por la calle y mucho más.
Todos, en mayor o menor medida, terminamos sucumbiendo a ese pequeño placer que supone acompañar nuestra rutina diaria con un pequeño guiño a nuestro entretenimiento favorito. A continuación os dejamos algunos buenos ejemplos: